Los Estados Unidos afirman su compromiso con los derechos humanos, incluyendo el derecho a la libertad de expresión mediante la protesta pacífica. Los incidentes de violencia durante las protestas, así como la violencia como forma de protesta, afectan las peticiones legítimas de reforma y progreso, las cuales deben ser resueltas por medio de la participación y el diálogo.
Los Estados Unidos hacen un llamado para que todos los hondureños, tanto manifestantes como los miembros de las fuerzas de seguridad, se abstengan de la violencia, que puedan guardar la compostura, y que demuestren respeto a los derechos fundamentales de sus conciudadanos. También solicitamos que se realicen investigaciones transparentes y expeditas sobre los casos de las personas que han fallecido o que han resultado heridas a consecuencia de las protestas, así como las denuncias de otras serias violaciones a los derechos humanos. La rendición de cuentas es un elemento importante de la democracia que contribuye a asegurar la confianza de los ciudadanos.